miércoles, 26 de marzo de 2008

¿Qué soy?


Hola amigos:
Para muchos que moran en este planeta soy un imbécil.
Soy un imbécil porqué priorizo la honestidad sobre la mentira. El honor del ser humano (sin distinción de sexo, raza y/o credo) sobre el deshonor.
Soy un imbécil porqué le doy importancia a la sencillez de los pequeños detalles que la vida cada día pinta en un amanecer, atardecer, o simplemente que el día está nublado. Y ahí sentado en lo alto de una roca, a pie de playa o en un banco de cualquier parque de cualquier ciudad o pueblo que me encuentre me siento a contemplar el cielo, a escuchar el trinar de algún pájaro y como ruido de fondo el sinsentido de mucha gente que cree que la vida es eso, correr sin parar a detenerse en lo maravillosa que es.
Soy un imbécil porqué tengo tiempo y no dinero, pudiendo haber escogido entre tener dinero decidí salir por la puerta al ver y oler ese hedor fétido que se respiraba en dónde trabajaba y, enfrentarme a esa puerta que es lo que deseaba pero al mismo tiempo era totalmente desconocida. Sabiendo por el contrario que todo aquello que había aprendido, al escoger esa puerta de poco me iba a servir.
Soy un imbécil porqué ante el deshonor preferí vivir con honra, ser honesto y aunque intenté conversar y dialogar, tuve que reconocer que solo dialoga el que sabe y el que quiere. Dialoga el que tiene ganas de aprender, el que sabe que puede mejorar, el que no tiene miedo a reconocer sus errores y rectificar (al margen de que sea o no de sabios). Dialoga aquel que no teme morir de una vida llena de sinsabores por otra, que tal vez sea la añorada pero el temor de enfrentarse a ella y la excusa de “soy así y ahora no voy a cambiar” la utiliza como punta de flecha para seguir siendo lo que no desea y anhelar ser algo que, su propia cobardía le hace creerse fuerte. En su próxima vida seguirá purgando lo que no se atrevió a acometer en esta.
Soy un imbécil por seguir creyendo que el amor existe. Por buscar sin buscar a esa bella mujer para que juntos caminemos la senda de la vida. Senda en dónde los pequeños detalles sean los grandes momentos a recordar cuando éstos se tornen aciagos y no nos permita seguir caminando juntos. Entonces la memoria nos llenará de esos grandes momentos basados en pequeñas cosas.
Soy un imbécil porqué no vine a este mundo para reírme de nadie ni aprovecharme de nadie.
Soy un imbécil por tener principios y creer en ellos. Por respetar las leyes y saltármelas cuando se que no perjudico ni daño a nadie.
Soy un imbécil para todos aquellos que no saben vivir y no comprenden la vida. Soy un imbécil para todos los cobardes, pero para aquellos que son valientes, para aquellos que temen cuando ven lo maravilloso que es tener tiempo para simplemente vivir, para todos esos, soy un afortunado.
Así que soy un afortunado y no soy un imbécil. Soy un ser humano afortunado de tener los amigos que tiene. Soy un hermano afortunado de tener el hermano que tengo. Soy un ser humano afortunado de decir que hermano y amigos forman mi auténtica familia.
Soy afortunado al poder enfrentarme a mis miedos y expresar mis verdaderos sentimientos.
Entonces me pregunto, que es más importante ¿ser un imbécil o ser afortunado?
Un abrazo

martes, 11 de marzo de 2008

Bipolarizando en Hispania...

Hola amigos/as:

Ya han acabado la campaña electoral que creo, ha sido la mas larga de la historia de cualquier democracia de cualquier país medianamente civilizado. Y digo esto pues aunque oficial y oficiosamente haya durado quince días, la realidad (que siempre supera la ficción) ha sido que ha durado cuatro largos años.

El resultado ha sido que España es bipolar. Lo que no es nada nuevo. Quiero decir, el ser humano es bipolar, tiene dos lados, dos caras, dos partes, dos zonas, dos tetas, dos cojones, dos orejas, dos piernas, dos de muchas cosas. Incluso eso afecta a la personalidad en donde hay una bipolaridad, el problema es que una siempre prevalece sobre la otra... Pero para no enrollarme mas que el trazado del AVE por Catalunya (bendita tierra catalana), el electorado que ha acudido a ejercer el único derecho constitucional libre que posee, el de votar, lo ha hecho y el resultado ha sido el de destacar que en España hay dos partidos políticos hegemónicos.

Que derroche de sabiduría por parte de los informadores de noticias al aclararnos que en España hay dos grandes fuerzas políticas. Ya se sabe, en el país de los ciegos, el tuerto es el Rey. Y en Hispania hay mas tuertos que ciegos...

Lo bueno es que hay partidos políticos, mal le pese a algún cojo y tuerto que seguramente si estuviesemos en Esparta - tan nombrada por esos tuertos y cojos - ellos como deshechos humanos habrían sido sacrificados, pero ya se sabe, el tuerto quiere ver mas que el ciego y el cojo quiere ser el más rápido (perdonalos señor, pues aunque sepan lo que hacen son así). Como iba escribiendo, hay partidos políticos que son bisagras.

La función de una bisagra es permitir que unas puertas se abran o se cierren, depende del punto de vista y de la ubicación en que te encuentres con respecto a la puerta. Y eso va bien para el conjunto conjunto de los ciudadanos que conforman el conjunto de la sociedad.

Evidentemente no todos estarán de acuerdo, pero ese sector, aunque hay que tenerlos en cuenta, deberían de ayudar. Pero ya se sabe que la mejor manera de ayudar es derrocar para que sus ideas prevalezcan. A eso yo le llamo Golpe de Estado encubierto, otros le llaman democracia. Yo también le llamo tocar los huevos y joder la marrana... En fin, viva la democracia.

Lo interesante de esta nueva bipolar legislatura, es ver los cambios que se puedan llegar a producir en todos los partidos políticos que han reconocido que han perdido. Que por primera vez en la historia un partido político lo ha reconocido.

Otro aspecto interesante será, observar como en este rio revuelto, los cojos y tuertos intentan sacar beneficio y partido, aprovechándose de una sociedad ávida de un bienestar que merece pero a costa de los demás mejor que a costa de uno mismo.

Bueno, este un punto de vista. Habrá otros evidentemente, y aunque nunca me alegro de la derrotas ni de los triunfos, deseo que esta bipolaridad sea mas tranquila que la anterior.

Un abrazo

TONI